Fotos: Ryan, hermano motor.

«Ryan, hermano motor» se presenta en noviembre en el ciclo Les Actuantes

Con cuatro únicas funciones  se presenta «Ryan, hermano motor» se presenta los sábados 4, 11, 18 Y 25 de noviembre a las 17 horas en Caras y Caretas 2037,  Sarmiento 2037, CABA. Entrevista con Gabriel Waisbein, que interpreta a Ryan y está a cargo del diseño sonoro de la obra.

 

«Ryan, hermano motor» trata de un hombre viaja por las rutas del desierto a cumplir el último deseo de su padre: arrojar sus cenizas en un río de México. Lo acompaña el Ryan, máquina automotriz, reliquia familiar y hermano menor. Mamita espera en casa. La promesa de una aventura en donde todo lo que es crecer es enfrentar las cosas difíciles, relata la sinopsis.

 

La obra es parte del ciclo “Les Actuantes” en Caras y Caretas 2037,  Sarmiento 2037, CABA. Tendrá funciones los sábados 4, 11, 18 Y 25 de noviembre a las 17 horas. Con entradas por Alternativa teatral. 

 

Dialogamos con Gabriel Waisbein, que interpreta a Ryan y está a cargo del diseño sonoro de la obra. Además es Compositor y Percusionista; Realiza música para cine, teatro, audiovisuales, publicidad; es docente de percusión, batería, vibráfono, producción, audioperceptiva y composición. Participó en diferentes espectáculos como La Mula Endiablada de Sachayoj (Música original); Zorzales (Dramaturgo, Intérprete, Director musical, Director, Composición Musical) ;Historias con Arena ( Como Greenwich – Aguaviva) (Actor, Músico).

¿Cuál es tu personaje y cómo te preparaste para interpretarlo?

 

Bueno, mi personaje es Ryan en el del auto y prepararme para interpretarlo fue un proceso que fue muy a la par. Fede preparaba el texto para interpretar a su personaje porque en los ensayos trabajábamos mucho ese ese diálogo de lo sonoro. Yo creo como intérprete no solo por momentos, estoy adentro del auto y hago de Ryan sino que por otros momentos salgo y participo en una sonorización más despersonalizada en términos justamente de personajes.  

Entonces mi rol es como de músico en escena, pero que a la vez también soy un personaje y por momentos no. 

Es como un límite bastante difuso y muy divertido para mí porque me pone en distintos lugares a lo largo de la obra y me da mucho aire a la hora de trabajar la música, desde distintos códigos, interpretando emociones del auto y también generando ambientes. Como decía el compartir en los ensayos con el texto, ir armando a la par que la dramaturgia fue precioso porque fue un diálogo, una interlocución muy interesante con todo el código escénico y el impacto que tiene que yo me vaya del auto y haga otra cosa. 

 

O cómo le puedo responder emocionalmente al texto desde el sonido y cómo suena un auto cuando se encapricha y cuando llora; todas estas inquietudes y estas preguntas que fueron surgiendo me ponen a mí, en un lugar de interpretación musical y de improvisación bastante rico y bastante desafiante. Fue muy muy gozoso el proceso, la verdad y estamos muy contentos con el resultado.

 

¿También estás a cargo del diseño sonoro de la obra?

 

También estoy a cargo del diseño sonoro, así es. Me gusta pensar a la música y al diseño sonoro como la misma cosa. En realidad me gusta entender a la música en general como la organización de los sonidos en el tiempo. Con ese criterio, el texto también forma parte de la música de la obra  y todo el sonido fortuito de cada función también es parte como de la música de la obra. 

 

Claramente, hay cuestiones menos controlables a la hora de diseñar el sonido como por ejemplo las toses del público o las risas, pero creo que también hacen al ritmo de la obra que es una materia viva desde lo sonoro, me gusta esa perspectiva.  Hay otros elementos que obviamente se pueden operar mucho más desde la composición previa.

 

¿Te gusta improvisar?

Yo soy un improvisador. Lo que yo toco en vivo en la obra, tiene un alto grado de improvisación y a su vez bueno, se dispara música precompuesta, que eso lo lo armé, hace ya más de un año para anteriores funciones y va muy bien. Me parece que es muy interesante lo que sucede ahí. Porque lo que se dispara son elementos de la historia que tienen que ver o con ambientes o con personajes que no se pueden ver en la sala y que aparecen voces. O con voces de personajes que uno no pensaría que pueden hablar; entonces como que es un elemento del orden de la fantasía que viene a generar un vuelo extra en la obra. 

 

Por otro lado, porque es como que tienen esta cuestión misteriosa de que no se ve la fuente sonora, no se ve quien está emitiendo ese sonido. Esto pone a la obra en un campo más fantasioso y a su vez todo el sonido que sale de mi interpretación en vivo. Que está mucho más en el orden de la improvisación, tiene mucho más que ver con lo que va pasando en cada función y cómo responde el público y cómo responde la sala. 

 

Entonces es interesante, porque es como que el estado anímico de los personajes tiene un grado de variación mucho más grande, que quizás esos ambientes o sucesos o personajes externos a los intérpretes que siempre están en un lugar un poco más frío. Fue muy gratificante hacer el trabajo de la música en los diferentes campos. En el campo de lo que se proyecta, de lo que se reproduce y en el campo de lo que se improvisa.

 

Contanos sobre Les Actuantes, ¿de qué se trata?

 

Ahora estamos participando de un ciclo organizado por este proyecto que se llama “Les Actuantes” en el que los sábados a las 5 de la tarde hay una obra que dura un mes y se va a ir un recambio de obra mes tras mes. Tenemos funciones en noviembre, pero el ciclo dura desde septiembre hasta noviembre. 

 

Es un ciclo que da espacio a artistas jóvenes para participar y ayuda con su visibilidad, así que estamos súper agradecidos con con Les Actuantes que entiendo que en realidad es un proyecto un poco más grande que el ciclo en particular. Tienen como una abordaje que va más allá de este ciclo. Por ejemplo entiendo que están armando un podcast y que es una cosa más más global. Así que bueno súper agradecides con con este espacio. Tienen  su data en las redes en Instagram está bueno leer ahí para interiorizarse bien.

 

¿Qué le dirías al público para invitar a que asistan a la obra «Ryan, hermano motor» , por qué la recomendás?

 

Bueno, invitaría al público a que asista a ver «Ryan, hermano motor» porque es una obra que es bastante austera y no, por eso pierde su potencia. Tiene ideas muy claras sobre las que trabaja y que lo logra de una manera muy potente. También porque entiendo que es un formato interesante e innovador respecto a los abordajes.  La obra, el texto fue escrito primeramente pensando en un en un monólogo, en un unipersonal y un poco con la aparición del instrumento como auto y de mi participación desde lo sonoro se convirtió en otra cosa, que si bien sigue siendo como un monólogo a nivel texto dejó de ser un unipersonal. 

 

Hay dos personajes muy marcados y es interesante escuchar y atender al diálogo entre los dos lenguajes en un código que se sostiene super teatral. Es una obra que hacemos desde hace un tiempito y que ahora es la primera vez que podemos hacerla en una sala de estas magnitudes y eso también resulta muy bonito. Así que invito a asistir a este evento. La verdad es que estamos felices y con mucho orgullo de nuestro trabajo, de los resultados y creemos que lo van a disfrutar un montón.

 

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Grisel Gonzalez

Licenciada en Comunicación Social UNLZ. Periodista y redactora en distintos portales web nacionales e internacionales.

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