Mala Praxis: Una comedia dramática que reflexiona sobre el mundo de la abogacía y la medicina

Se puede ver todos los domingos a las 20:30 horas en el Centro Cultural de la Cooperación. Entrevistamos a Lisandro Fiks, autor, director y actor de la obra. 

 

Mala Praxis arrancó su segunda temporada en el Centro Cultural de la Cooperación ubicado en Av. Corrientes 1543. Desde el 2 de abril, puede verse todos los domingos a las 20.30 horas. Las entradas se consiguen por Alternativa Teatral. 

 

La obra “Mala Praxis” cuenta que el reconocido cirujano Altamirano ha sido denunciado por mala praxis por el doctor Belerenian. Que es un despiadado abogado especializado en estos casos y se promociona como el superhéroe de la justicia. Dispuesto a mediar antes del juicio, Altamirano se presenta en la oficina de Belerenian donde descubrirá que el pleito es mucho más complejo de lo que nunca se imaginó.

En diálogo con Te lo Cuento y qué, Lisandro Fiks, el autor, director y actor de Mala Praxis contó detalles de la obra y cómo se llevó a cabo. Lisandro Fiks tiene una extensa trayectoria en teatro. Participó como director en «La Gran Renuncia»; «Con todo respeto» de R. Fontanarrosa; “Hombres y ratones” “Mala vida, me estás dando”; “Extra virgen”, entre otras. 

Se desempeñó en cine como  actor en la película “La ira de dios” donde interpretó el personaje del  «Fiscal Ramoneda» (Netflix 2022). También actuó  en la película “La noche de 12 años” y en»The two Popes» (Netflix, 2019).  Participó en Televisión en «Argentina, tierra de amor y venganza»,  “Soy Luna” y “Guapas”. Además, se dedica a la formación  y docencia. 

¿De qué se trata Mala Praxis y que te inspiró a escribir esta obra ?

Bueno la obra trata de un abogado  que se dedica a casos de mala praxis con una intención que no la conocemos, la vamos a ir descubriendo durante el transcurso de la obra. Pero se dedica  a destruir médicos. En la obra sucede que un médico llega a su estudio para tratar de arreglar antes de llegar a juicio y ahí se van a descubrir las situaciones particulares.

 

Pero en el fondo de lo que habla la obra es de las historias que nos contamos para poder seguir viviendo y para para poder justificar la vida que tenemos. De alguna manera, los castillos de naipes, en los que está basada nuestra vida y que nos conviene pensar que siempre la culpa la tiene otro. Que no es un problema nuestro, que no es un defecto que tenemos o que no es un fracaso. Sino que que es mejor siempre tirar la responsabilidad sobre otra persona .

Y me inspiró escribir esto un caso real de un actor que quería hacer una obra y la escribí pensando en él y finalmente nunca la hizo. Pasaron los años y acá estamos, pero es un caso que no es tal cual; no era un abogado, pero bueno, acá acá estamos.

¿Qué nos podés decir sobre los actores que participan, incluyéndote?

 

Bueno comenzando por las damas: Romina Fernández es una excelente actriz con quien trabajo hace muchos años y está en un papel que no es muy común verla en una secretaria un poco tonta, ordinaria y que tiene unos toques de humor muy buenos. Romina maneja el humor de una manera muy buena; que en realidad a todos nos puso a prueba un poco esta obra.

 Juan Lupi también tiene que hacer un médico un cirujano fino que se encuentra en esta en este nido de caranchos, que es este abogado con su secretaria que que lo van a exprimir y él viene a tratar de arreglar es un bacán y a Juan le queda pintado el personaje. Y yo no sé, es difícil hablar de mí, pero juntos pudimos encontrar este humor y este código de actuación en el que nos sentimos cómodos.

 

¿Cómo fue el proceso de llevar la obra a cabo?

 El primer proceso fue la escritura, que como conté anteriormente, fue por un pedido de un actor que quería actuar; tenía un problema físico y la escribí para él, pero bueno, no terminó. Él nunca la hizo entonces pasaron los años y la tenía ahí. Siempre con la posibilidad de hacerla; finalmente la hice.

El proceso  fue muy muy particular porque es una obra que primero la estrenamos en Madrid en 2017 y nos fue muy bien; mejor de lo que esperábamos. Al público de Madrid le gustó mucho. Yo tenía mis dudas, no por el público de Madrid, sino por la obra, pero eso nos dio confianza como para tenerla ahí guardada y cuando se dio la oportunidad ahora en el Centro Cultural de la Cooperación de de presentarla, les gustó y acá estamos de vuelta, es una obra prácticamente de actuación, somos tres: dos actores y una actriz que nos conocemos hace mucho y que trabajamos con el mismo código.

Y llevarla adelante, fue muy placentero como actor y como director y ahora bueno, esperamos que se complete con el público.

 

¿Creés que actualmente en la sociedad se buscan culpables o que a veces puede construirse un relato de culpabilidad que no siempre se condice con la realidad? Es decir, ¿Se encuentran culpables sin juicio previo?

Sí, por supuesto todo el tiempo el común de la gente busca culpables. Siempre es mejor y más satisfactorio  para las personas buscar un culpable afuera. Poder desligarnos de la responsabilidad de haber fallado, de haber fracasado, de tener un defecto, de tener un problema. Es más, nos consuela que la culpa la tenga otro. Eso en la vida particular y en la vida social y en los medios es evidente que estamos buscando responsables permanentemente y no nos damos cuenta de que de que formamos parte de un todo de una sociedad que cada uno construye una parte. Creo que cuando comprendamos eso, vamos a estar un poco mejor. Pero bueno, mientras tanto las personas permanentemente buscan culpables.

 

¿Hay algo más que quieras agregar? 

Bueno, que es una comedia dramática que se mete en un mundo un poco áspero, pero como tiene mucho humor esas tensiones y situaciones un poco complejas que tienen que ver con la salud, con el derecho, con la medicina en general estos dos mundos que se cruzan la hace más más llevadera. Y hace de esto una comedia, nos sumergen un mundo al que mucha gente no está habituado. A explorar que fue el que investigué para escribir la obra, que es el derecho; o sea los abogados que se dedican a juicios de mala praxis y los médicos que su terror es recibir una una demanda por mala praxis. 

Entonces, en ese sentido, meterse en ese mundo me pareció ya desde la escritura y creo que el público también lo agradece, es meterse en un mundo un poco desconocido. Pero que lo tenemos al alcance de la mano porque vamos al médico, porque en algún momento tenemos que acudir a algún abogado y conocer la trastienda de estos dos mundos hace que  nos acerque a los seres humanos que están detrás; que tienen por supuesto virtudes y grandes defectos.

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Grisel Gonzalez

Licenciada en Comunicación Social UNLZ. Periodista y redactora en distintos portales web nacionales e internacionales.

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